18.5.02


¿Que se vayan todos? Respuesta para tantos imbeciles...

Hola!

En estos días lloramos en Olavarria la muerte de un concejal y militante social de aquellos. Mario Mendez se llamaba y falleció de un derrame cerebral, seguramente producido por la carga insoportable, el estress producto de su trabajo de tratar de estar cerca y laburar por y con todos los que el sistema va dejando de lado día a día.

Mario fue un detenido-desaparecido de la dictadura que volvió. Fue uno de aquellos que no se quebró, no denunció, no acusó a nadie a pesar de que lo torturaron mucho más que barbaramente. Cuando salió en libertad, volvió a trabajar, a militar como el primer día junto con la gente. Un conductor de radio decia en su editorial de estos días que Mario "fue cambiando de partido para no cambiar de ideología" en estos años que transcurrieron desde que reingresó a la política hasta este principio de milenio tan desesperanzador.

Vivío siempre en la misma casa de un modesto barrio popular. Tuvo 5 hijos y dicen que era un buen padre y compañero. Los que lo trataron mucho, dicen que era un buen amigo. Yo lo saludaba nada más, y voy a arrepentirme de no haber dado algún paso más hacia su humanidad. Trabajaba en la comisión de la memoria, era concejal, fue precandidato a intendente. Le gustaba trabajar de carpintero en los escasos ratos libres, se opuso a lo que había que oponerse. "Un tipo que no trepó, que no escaló, que estuvo siempre peleandola, que más allá de todo hizo lo que tenía que hacer por la gente que la pasa mal", según su compañero de bancada del Polo Social. Su último logro fue impulsar desde la CTA un comedor popular infantil donde comen 138 chicos por las noches.

Mario Mendez se fue. No va a volver en esta vida. Mientras tanto, otros no se van aunque sobren, y tantos imbéciles más compran el discurso de lo anti-politico que quiere "que se vayan todos, que no quede ni uno solo"... ¿Y después qué? Este político no es todos, pero entre todos, debe haber muchos otros como este.

Estén tranquilos, este ya no está. Pero desgraciadamente nos va a hacer falta cada día más...

Jorge Arabito

No hay comentarios: